El primer ministro indio, Narendra Modi, pidió a los habitantes del territorio de Delhi “paz y fraternidad” luego de los actos violentos que se registraron por los enfrentamientos entre nacionalistas hindúes y musulmanes que desde el pasado domingo dejaron al menos 22 muertos y casi 200 heridos.
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“La paz y la armonía son fundamentales para nuestro espíritu. Hago un llamamiento a mis hermanas y hermanos de Delhi para que mantengan la paz y la fraternidad en todo momento”, dijo Modi.
Estos hechos pasaron a ser las peores agresiones en décadas en Nueva Delhi y el jefe de gobierno de la capital había solicitado al gobierno central que decretara un toque de queda, además de un despliegue del ejército.
