La justicia francesa abrió una investigación tras dos falsas alertas de bomba que obligaron a evacuar la Torre Eiffel en París el pasado sábado 12 de agosto, informaron a EFE fuentes judiciales.
“La Fiscalía de París ha remitido a la comisaría del distrito 7 una investigación sobre amenazas de cometer delitos contra las personas y divulgación de información falsa con el fin de hacer creer que se van a cometer o se han cometido destrozos peligrosos para las personas”, indicaron.
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De acuerdo con la legislación francesa, esas infracciones son castigadas con penas de hasta dos años de cárcel y multas de 30.000 euros.
Las dos potenciales amenazas fueron identificadas por la plataforma Pharos del Ministerio de Interior, encargada de señalar posibles delitos en la red, específicamente en los portales webs internet jeuxvideo.com y moncommissariat.fr.
El reporte oficial detalló que la primera alerta se registró alrededor de la 1:00 de la tarde del sábado y no se levantó hasta las 3:30 de ese mismo día. Durante ese tiempo la Policía desplegó a artificieros y se evacuó tanto la Torre Eiffel como las zonas cercanas por precaución.
Una vez descartada la alarma, pero a última hora de la tarde -aproximadamente a las 7:30 horas- volvió a repetirse el incidente hasta las 9:00 de la noche.
Las evacuaciones ocurrieron en los tres pisos de la torre, incluyendo el restaurante interno, y la plaza alrededor de la estructura, de 330 metros de altura, ubicada en el distrito VII de París.
