Largas filas en las estaciones de servicio se registran en los últimos días en la ciudad de Miami y gran parte del sur de Florida, Estados Unidos, producto de la escasez de gasolina derivada de problemas en el suministro.
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Una de las causas de este fenómeno se debería a las recientes inundaciones en ese estado por las lluvias.
Esta versión también sería expuesta por la alcaldesa del condado de Miami-Dade, Daniella Levine-Cava, quien resaltó que el ayuntamiento floridense “trabaja estrechamente con nuestros socios estatales y federales para asegurar que los combustibles se distribuyan lo más rápidamente posible”.
Los residentes de Florida, por su parte, han expresado su preocupación por el creciente desabastecimiento del hidrocarburo. Así lo dijo un conductor entrevistado por la cadena Telemundo.
“Estoy preocupado porque si no encuentro gasolina, cómo me voy para la casa (…) no me puedo llevar el carro al hombro. Hay que informarle al pueblo para que uno no se lance para la calle sin saber que no hay gasolina”, declaró un habitante de Miami-Dade, identificado como Daniel Herrera.
El Puerto Everglades de la ciudad de Fort Lauderdale, condado de Broward, expresó mediante un comunicado que las inundaciones averiaron algunos de los equipos de bombeo. Sin embargo y pese a no trabajar a marcha máxima, resaltó que cuenta con gasolina en sus depósitos.
“El público puede experimentar retrasos en la entrega, típicos después de los desastres naturales. Aunque hay empresas que todavía se recuperan debido al exceso de lluvia y las inundaciones, otras siguen operativas. Se espera que el despacho de combustible aumente en los próximos días”, indicó en una misiva la administración del Everglades.
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