El Gobierno de Estados Unidos planea aplicar el Título 8, una medida que le permitirá la deportación y la repatriación de migrantes que cruzan ilegalmente la frontera sur, luego que finalice el Título 42, según Blas Nuñez-Neto, funcionario del Departamento de Seguridad Nacional (DHS), lo que podría poner en riesgo la estabilidad de los migrantes venezolanos en la nación norteamericana.
“Una vez que se levante se aplicarán las reglas del Título 8, como se viene haciendo desde hace décadas, “que tienen consecuencias importantes para la gente que cruza ilegalmente la frontera”, como “la repatriación”, que “pierdan la habilidad de venir a Estados Unidos por hasta diez años” y procesamientos legales “por el crimen de cruzar la frontera”, afirmó durante una llamada telefónica a la prensa el subsecretario interino de política fronteriza e inmigración.
En este sentido, detalló que las personas que no posean una base legal ajustada a las normas de inmigración del país, no podrán permanecer en Estados Unidos, por lo que deberán deportadas.
“Ya tenemos la capacidad de hacer vuelos de repatriación a Nicaragua, con el tema de los nacionales de Venezuela estamos en discusión con México y otros países para ver qué se puede hacer en ese sentido”, afirmó Nuñez-Neto.
Durante el año 2022 un gran número de venezolanos logró ingresar a territorio estadounidense de forma ilegal a través de sus fronteras, atravesando peligrosas rutas como la selva de El Darién y el cruce del Río Bravo en busca de asilo.
Actualmente el gobierno del presidente Joe Biden aplica el Título 42, una norma de salud pública aprobada durante el gobierno de Donald Trump, que permite expulsar inmediatamente a cualquier extranjero o no residente que intente entrar en el país sin documentación.
Respecto a este punto, Blas Nuñez-Neto acotó que se encuentran evaluando sus planes para su suspensión.
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