Armando Benedetti se retira de su cargo como embajador de Venezuela a raíz del escándalo de “interceptaciones telefónicas y posible abuso de poder”, en el que también está implicada la jefa de Gabinete Laura Sarabia, afirmó el presidente de Colombia, Gustavo Petro.
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Petro aseguró que ambos se retirarán para que “desde el poder que tienen estos cargos se pueda dar la confianza de que no se van a alterar los procesos de investigación”.
La retirada de ambos funcionarios se debe al caso del hurto de un maletín con dinero de la casa de Sarabia, robo que fue atribuido a Marelbys Meza, una mujer que trabajó para ella como niñera.
De acuerdo con declaraciones de Meza, cuando Sarabia supo del hurto “la hicieron ir hasta una dependencia presidencial donde fue interrogada y sometida a pruebas de polígrafo sin una orden judicial”.
Además, se conoce que las autoridades policiales interceptaron de manera ilegal su teléfono, usando como fachada una operación contra la banda criminal del Clan del Golfo.
Mientras que la implicación de Benedetti se dio como presunto instigador de las denuncias de la exniñera, de acuerdo con lo reseñado por la agencia de noticias EFE.
Petro añadió que su Gobierno no tiene “nada contra la ciudadana Marelbys; la he conocido en medio de mi campaña, siempre me ha abrazado con cariño casi que maternal. Así que ella no tiene nada que temer de mi Gobierno, porque es nuestra amiga”.
El mandatario colombiano aseguró que su Gobierno “respeta los derechos humanos” y “no intercepta ilegalmente comunicaciones de magistrados, de periodistas, de opositores”.
“A los opositores los cuidamos. No les puede pasar nada porque están bajo nuestra responsabilidad. Contra ellos no habrá nada que choque contra la Constitución y la ley”, manifestó.
