En la reciente emisión del programa “Rostros de La Crisis” de VPItv, conocimos la historia de Dayson Enrique Fernández, un joven margariteño de 25 años que logró salir de la vida indigna que tuvo a sus 15 años y hoy pide una segunda oportunidad.
A pesar de sus esfuerzos por cambiar su vida, Fernández se encuentra luchando para mantener a su familia en una sociedad que, según él, no le ofrece oportunidades. “Yo he salido a buscar trabajo, pero no prefieren a uno”, expresó.
Dayson, quien ahora pide dinero y comida en los semáforos para mantener a su esposa y a su pequeño hijo, reflexionó sobre su pasado y su presente. “Yo pido misericordia de Dios, él me mandó esta prueba de vida porque yo era malo y esto que estoy viviendo es parte de eso”, confesó. Sin embargo, aseguró que ahora está en el buen camino, a diferencia de antes cuando delinquía y vivía con el temor constante de ser asesinado.
A pesar de haber dejado atrás su comportamiento problemático, Fernández ha tenido dificultades para ser incluido dentro de la sociedad. No obstante, reconoció que su situación actual es una consecuencia de su oscuro pasado.
“Cuando yo era menor de edad no tenía una buena vida, era malo, me gustaba lo fácil y les hacía daño a las personas que en realidad trabajaban por lo suyo (…) robaba las pertenencias de los demás y no me da pena decirlo, esa era la realidad que yo vivía”, dijo.
El joven margariteño, que perdió una pierna hace ocho años debido a un disparo en una pelea callejera, expresó su deseo de tener una casa para vivir en paz con su familia y pidió aceptación. “La vida es complicada y no es fácil (…) ojalá que Dios me dé una oportunidad”, asegurando que todas las mañanas reza para que su situación mejore.
