De acuerdo con el alto comisionado de Naciones Unidas paras los Derechos Humanos, Volker Türk, Israel estaría cometiendo un crimen en la Franja de Gaza al utilizar el hambre de la población como un “método de guerra”.
“La situación de hambre, inanición y hambruna es consecuencia de las enormes restricciones impuestas por Israel a la entrada y distribución de ayuda humanitaria y bienes comerciales, del desplazamiento de la mayor parte de la población, así como de la destrucción de infraestructuras civiles vitales”, declaró Türk.
También añadió que las restricciones permanentes a la entrada de ayuda humanitaria a Gaza, está sometiendo a la población “a un castigo colectivo”, como métodos que pueden calificarse de “crimen de guerra”.
A su juicio, si se están viendo episodios de caos y desorden civil es porque la desesperación es inmensa, a tal punto que las familias están recurriendo a la decisión extrema de enviar a solos y a pie los niños que todavía están en el norte de Gaza hacia el sur, con la esperanza de que allí encuentren algo de comer y ayuda.
Actualmente, en el sur hay más de 1.8 millones de personas desplazadas debido a la hambruna y el aumento de muertes registradas en el norte de la Franja.
Türk volvió a insistir en que Israel, como potencia ocupante, está en la obligación de garantizar el aprovisionamiento de alimentos y atención médica a la altura de las necesidades de la población, así como de facilitar el trabajo de las organizaciones humanitarias.